jueves, 23 de febrero de 2012

Poema Deshecho no. 2

Acá les va otro de mis descabellados intentos de poesía. En un momento fue una carta de amor, lo pulí un poco cuando pasaba el  S.M.A. por eso tiene el lugar en que fue escrito debajo. 
Los "Poemas deshechos" son primos cercanos de este blog: cada vez que mis frustaciones dan lo suficiente como para garabatear una hoja o caerle a golpes a un teclado, los poemas aparecen. 
Saboreen este que detras les traigo otro. 
Bostecen al final: ya se probó que es bueno para la salud.


“Poema deshecho no.2”


Mírame bien.
De norte a sur, de este a oeste, de frente o de perfil.
Analízame.
Pero antes deshazte de tus prejuicios,
no vengas maniatada por los pérfidos esquemas que impone la 

muchedumbre.
No busques respuestas a tus recurrentes plegarias,
no lo hagas, pues la desilusión te espera detrás de mi puerta.

Mejor desnúdate de lo externo y ven al encuentro de mis huesos,
a esta fiesta de frescos sentidos que remontan la inexactitud de lo

 exacto,
a esta ronda de lirismo insípido que suena a adjetivos huecos y 

desorientados.

¿Ya miraste?
Podrás notar (sin grandes cavilaciones) que no soy el típico modelo de Adán
Que mi estructuración recurre a la asimetría como versículo principal,
que el ABC de mi belleza física reposa en el brillo de mis gastados ojos. 
 

¿Tendencias?
Nunca las he seguido. 
 
Prefiero creerme la aguja que solitariamente mira al cielo desde el pajar.

Tengo secretos.
Son mi escudo contra los puñales del tiempo; 
 
algunos los revelé y pagué caras las consecuencias.
No intentes adueñarte de ellos, romperías el misterio.

¿Estrategias de conquista? 
 
Ninguna.
Palpo en la incertidumbre, espero a encontrar un ser recíproco y afín,
alguien que acepte mi manojo de defectos como la mejor de las virtudes.


Soy como soy.
Sacrificar mi estilo de vida a cambio de esa enmarañada sensación a la que
 
alguien llamó amor,
traicionaría todos los ideales por los que lucho.

Por eso te pido…
Mírame bien:
de arriba a abajo, de lado a lado, de frente o de espalda.
¿Concluiste?

Ahora cierra los ojos.

Observa en tu interior y dime si sientes lo que digo,
si dentro de ti se desata algún tipo de ventisca que amenace con destruir

 mi soledad,
si tus frustradas alas encuentran en mi cielo el sitio

 perfecto para alzar el
 
/vuelo,
si piensas que de algo valdrá compartir sueños e

 ilusiones, empeñados en 
 
/materializarlos juntos.


Abre los ojos…
Busca los míos y míralos fijamente.
Sería un placer inmenso compartir mis días contigo.

¿Qué dices tú?


(Cacahual. Jueves 18-6-09)

1 comentario:

  1. BUENO ME GUSTO, NO SABIA QUE LE METIAS A ESTO, ME ALEGRO MUCHO, QUIEN LO DIRIA ANGELITO EL NIÑITO CHIQUITICO YA TODO UN HOMBRE ESCRITO, Y MUSICO, ME ALEGRO MUCHAS FELICIDADES Y MUCHO EXITO DE VERDAD. BESOS DANITA

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